“Si no estás fracasando no lo estás haciendo bien” o “fracaso = a éxito” pueden ser el “lo que pasa en Las Vegas se queda en Las Vegas” de Silicon Valley (centro de emprendurismo)
El fracaso es una constante en los libros de los gurus de emprendimiento/autoayuda. Se nos motiva a armar nuestra start-up y a fracasar dando lugar a todo un cementerio de empresas inviables.
Las start-ups son empresas muy riesgosas, requieren de mucho trabajo y capital. De por si alentar a la creación de estas start-ups debe de hacerse con cuidado. Inspirar a las personas a emprender sabiendo que solo 1 de cada 10 podrá sobrevivir es algo de dudosa intención pero decirle que el fracaso está bien es solamente perpetuar su insatisfacción. Es cruel.
El fracaso no es exactamente el santo grial del emprendimiento. Que en tu primer turno te hayas ponchado no quiere decir que en tu segundo turno vayas a pegarle a la bola.
El fracaso está sobreestimado. No deberías fracasar deberías triunfar en tus oportunidades. Si recibes una paliza, no debes de ir de nuevo obstinadamente a pelear eso no es perseverancia es estupidez. En otras palabras no deberías de volver a intentarlo en cambio debes de volver a la practica en busca de mejorar.
Mitificando el fracaso nuevamente, tendremos idea de la seriedad de emprender y lo haremos cuando tengamos conocimientos, base y una oportunidad real.