Dejaré de ver películas y series5 minutos de lectura

Considero que el ser humano puede ser condicionado y es programable. Llegamos a este mundo con la mente vacia y es durante la infancia donde aprendemos las conductas y reglas de la sociedad, hasta la llegada de los instintos naturales que en la adolecencia desarrollamos como fruto de nuestro sexo. Es por ello que si nos sometemos a un ambiente en donde se percibe X conducta o experiencia como normal y positiva, es de esperar que actuaremos en favor de susodicha conducta aunque vaya en contra de nuestra naturaleza, reprimiéndonos.

Asi mismo el ser humano está siempre en desarrollo y su cerebro nunca para de hacer nuevas conexiones por lo que aunque su programabilidad no es tanta como en la infancia si que en la adultez existe el efecto de “lo que mucho veo es normal “.

Es de mi opinion que Hollywood es consciente de su poder y por ello actúa como un agente de cambio en la sociedad, promoviendo las conductas que considera deseables.

Cada escena dice algo, cada posición de actores, fondo, dialogo, drama, conflicto, desenlace favorece una idea y esas ideas son comúnmente dirigidas, promovidas y actuadas

por una comunidad artística marcadamente de izquierda. La “vena creativa” se suele encontrar entre el estrato social de la minoría que utiliza drogas, es bohemia y de alma libre.

Pero su interés en algunas ocasiones no sólo es idiologico si no que es económico, es sabido que Estados Unidos da facilidades a aquellos proyectos mediáticos que los proyectan de manera positiva así mismo es más fácil conseguir patrocinios si los valores de la películas son “positivos”. Es bueno recalcar que eso que llamamos positivo o bueno es artificial y puede ser manufacturado por ende podemos remplazar la palabra positivo por “favorable” por ejemplo la esclavitud fue vista como positiva en un momento.

Las películas y las series vienen con cada vez más agenda. Es perceptible que ideales apoyan los responsables del proyecto y cada vez más se adentran a los confines de la izquierda. Dirigiéndonos a través de efectos audiovisuales y actuaciones a aceptar la superioridad en quien tiene los ideales “correctos” y a odiar al villano que no piensa bien.

Es por la continua agenda feminista, homosexual, transexual, pro-drogas, anti-hombres, anti-religion, anti-valores tradicionales que he decidido no ver mas películas y series.

Feminismo:

Los hombres y las mujeres son diferentes. Cada quien desarrolla unas competencias, una personalidad y unos roles distintos, fruto de las diferencias físicas, neuronales y hormonales de cada sexo.

Los hombres desde toda la existencia humana han sido los proveedores, los cabezas de familia y los protectores. Esto es producto de una marcada diferencia muscular y hormonal (testosterona) que por su papel en la sociedad a lo largo de miles de años (cazar) y gracias a la evolución han desarrollado.

Así mismo las mujeres han desarrollado un cuerpo, un cerebro y hormonas que favorecen competencias de empatía, organizativas, familiares y de educación gracias a la evolución y su función natural de dar a luz.

El feminismo del siglo 21 es uno de frustración, mujeres que quisieron haber nacido niños, un repudio a lo que se es y una idealización positiva pero anormal de lo que no se es. Las mujeres no pueden ser hombres así como los hombres no pueden ser mujeres y promover eso es un crimen contra la naturaleza que desemboca en insatisfacción. Hombres y mujeres deprimidos e infelices. Que se comportan en contra de su naturaleza.

Mujeres promiscuas, mujeres militares, mujeres obreras, mujeres presidentes un invento moderno para satisfacer el sistema consumista. Las mujeres son seres hermosos, con grandes ventajas, con inteligencia emocional superior al del hombre, con muchas capacidades pero no por ello vamos a promover comportamientos , aspiraciones y pensamientos que no son naturales de la mujer. De encontrarse una mujer en un papel de hombre es una excepción, una estadística fruto de la ley de los grandes números un número mínimo y esperable, poner a aspirar a a las mujeres a algo que por naturaleza no quieren ser es sembrar la semilla de los problemas sociales. La promiscuidad en las mujeres fruto de la propaganda de liberación vaginal a roto más matrimonios y a traído más dolor al mundo que quizás cualquier otra idea. Nunca en la historia del ser humano ha habido algo así como mujeres promiscuas vistas positivamente, solo en los últimos 35 años se promueve la diversión sexual desembocando en más niños infelicies y en futuros criminales.

La homosexualidad y los transexuales: estás personas son anormales por definición. Representan un número estadístico, que así como el discapacitado mental que es un número per capota, por cada 100,000 personas nacen x personas con uno de estos comportamientos. Entiendo que estás personas deben de ser libres de hacer lo que ellos quieran, tener su pareja, tener facilidades legales para formalizar la pareja, tener sus espacios, no ser maltratados ni violentados así como también el discapacitado mental tiene facilidades institucionales y legales. Pero de ahí a promover un comportamiento como este en los medios de comunicación y tratar de ponerlo como normal hay todo un abismo. Ese comportamiento pervertido no es normal y por ello debe de quedar en la esfera de lo tabú.

Las películas y series ahora utilizan música romántica, tomas sexys para exponer un romance gay trayendo como consecuencia una confusión en el infante o adolescente pues esta siendo objeto de un artificio directivo donde la única tarea de la escena es hacerle sentir algo excitante con la ayuda de los efectos audio visuales que probadamente desembocan en ese sentimiento. Es por ello que la maleable personalidad del no adulto puede desembocar en una identificación y experimentación que luego cuando esté sea un adulto traerá arrepentimiento.

Conclusion:

La idea es la misma en cada tema, las conductas anormales que van en contra de nuestra esencia y naturaleza no deben de ser promovidas. Ver contenido que promueven estos temas son caballos de Troya que luego traerán consecuencias deplorables.

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