Walt Disney fue un visionario que supo ver el poder de su creación “el ratoncito mickey” su visión lo llevó a armar todo un emporio basado en el mundo fantasioso del encantador ratón.
Las marcas se han dado cuenta de este poder y han recurrido a utilizar su propia marca para hacer interacciones sociales.
Las marcas ahora se comportan como personas, con personalidad y sentido del humor. Todo parte de un nuevo modo de acercar más al cliente a la marca y sacarle más dinero. Una etiqueta o mención a nuestro usuario social “@“ por una de las marcas es un reconocimiento que es digno de ser contado a todos.
Ante la felicidad de una amiga por ver unos chistes de grandes marcas en un mismo post. Me puse a pensar que tenía esto de especial.
La verdad que es difícil de ver pero esto es lo mismo que Mickey Mouse. Una ficción creada para hacer dinero. Cuando Mickey te saluda en la 5ta avenida de New York quien verdaderamente te saluda es un sudoroso y necesitado empleado de una compañía sin dueño. No es para tanto.
En este post todos p as decían ignorar la similitud se sorprendían y se entusiasmaban de ver a todas las marcas importantes en un solo lugar.
Si quitas la tapa de todo chiste o interacción verás que quien te responde es un community manager. Amazon no existe, Domino pizza no existe. Fue Eduardo quien te respondió.
Esta ficción va más allá de la marca y es permeable a la empresa misma. Es contra-intuitivo pero Las empresas son grupos de personas, no es más que eso.
Que tanto interactúe una compañía que tantos chistes haga debería de no importar, la verdadera personalidad de la marca debería de venir de las políticas dentro de la empresa: igualdad salarial, no discriminación, dignidad ect y no de que diga o no diga Eduardo “el de las redes”.