A Muchas personas se les achaca el haber fracasado en empresas. Es visto como una mancha en el historial del emprendedor, un efecto como el del ex-convicto al buscar trabajo. Desde mi punto de vista no todos los fracasos son malos en cambio fracasar es en muchas ocasiones algo bueno y una ventaja.
Empezar un negocio y quebrar es una experiencia amarga pero también una ventaja pues conlleva y aquí el punto más importante: “una retroalimentación” claro a nadie le gusta aprender perdiendo dinero pero esta es quizás la mejor forma de aprender pues es una experiencia en carne propia que te aseguro no olvidaras. Preguntas cómo: ¿qué hice mal? ¿Cómo pudo haber salido mejor? Respondidas post-mortem desde la reflexión y no desde la depresión, son respuestas muy valiosas que te acercan al éxito. Ojo no se vale fracasar y no aprender y repetir el mismo error una… tras otra…. tras otra…. Esto es una pérdida de energía que si merece el repudio del que disfruta el fracaso.
El Fracaso es un componente primordial del círculo virtuoso del emprendedor. Círculo que consta de 3 componentes: Nueva idea, ejecución de la idea, éxito/fracaso.
El éxito y el fracaso son dos caras de la misma moneda llamada información.
El éxito es una confirmación de tu idea y por eso es motivo de celebración pero el fracaso también debe de ser celebrado con alegria pues es un alivio que significa que el camino empresarial por el que andabas sencillamente no era el correcto. O ¿hubieras preferido seguir por el camino incorrecto con todas sus implicaciones de gastos, capital energía y tiempo?
La infamia del fracaso parece venir de contravenir la máxima de “nunca rendirse” y por eso muchos se niegan a cambiar pero ¿de cuando a donde es más inteligente y loable perseverar en una empresa vampiro que se demuestra estancada, que fracasar y seguir adelante con lo aprendido? Ejecutar, fracasar y soltar es un logro dado que aquello que no funciona debe de reinventarse para que funcione.
El fracaso significa intento, y solo son los intentos los que llegan a ser éxitos. Solo la empresa más apta podrá lograr sus metas de crecimiento sostenible y la única forma de lograrlo es mediante el fracaso frecuente.