En la actualidad America Latina sufre una gran desestabilización socio-política. Países de izquierda y de derecha ven surgir sin distinción protestas en demanda de cambios o justicia.
Vemos una clara tendencia a nivel regional en donde “el pueblo” hace uso de su derecho a protestar para hacerle frente a las políticas desfavorables. Esta reacción lejos de ser espontánea es una consecuencia de la frustración de las personas ante la realidad de que los políticos NO cumplen expectativas lo que a desembocado en una crisis de confianza.
Los políticos son los culpables de su propia desgracia pues sin distinción de “izquierda y derecha” la principal labor del líder de oposición es ofrecer un mensaje agresivo, populista y de cambio. En pocas palabras con tal de ganar las siguientes elecciones, se promete de todo al elector. Y Cuando la oposición gana: no bajan los impuestos, es nepotista y no complace más que un grupo selecto de electores millonarios que financian las campañas.
No hay formas de pensar distintas entre políticos catalogadas como derecha o izquierda, liberal o conservador son puros inventos de la clase alta para enfrentar a la clase baja y dividirla. Estamos en presencia de un sistema putrefacto, que beneficia al político más mediático y más fanfarrón. Necesitamos una refundación necesitamos dejar atrás “el sistema” ideado por nuestros abuelos e innovar dentro de la administración pública, así como se innova en tecnología. Para que por FIN el siglo 21 llegue al estado.
#fuerzachile las crisis son oportunidades para unirse y sacar algo adelante. A veces es necesario que se derrumben ciertas estructuras para que se creen nuevas.